Los orígenes de Senderuelo están ligados a Carnicerías Mari, un pequeño negocio en Sonseca fundado en 1975 por María Isabel Romero y su marido Francisco García Palacios. Hasta ese momento, ambos se dedicaban a dos de las actividades más importantes de la época de este pueblo toledano, el mazapán y la madera.

 María Isabel y Francisco comenzaron esta aventura con mucha ilusión y con las ganas de ofrecer los mejores productos a sus clientes. Su afán de superación les condujo a pasar de tener un número de animales muy reducido a aumentarlo hasta crear la granja que, actualmente, es el sostén y el pilar principal de Senderuelo.